Como me mirabas, imposible olvidarlo...
Esos ojos tuyos, que son míos en esos ojos míos ,que son tan tuyos...
Esos besos no fueron fruto de la nostalgia acumulada, del sentimiento polvoriento ni de la pasión apolillada.
Algo mas había allí, tan profundo, tan intenso que ni las palabras de tu boca (discurso ya tan poco consistente y oxidado) logran convencerme de aquello que ni tu te crees.
Tu compañía es dulce.
Tus manos suaves.
Tu aroma, mi hogar.
Mi boca tu refugio
Mi cuerpo tu delirio
Yo entera, tu tempestad...
Desgraciado el día que llegaste...Desgraciado el día en que te vas.
Junté mis lágrimas opacas, esas mismas que tantas veces me viste llorar...
Creíste que eran por tí...te digo mi amor, que eran por mí, porque nunca te he dejado de amar...
lunes, 2 de marzo de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario